Hay víctimas del acaparamiento

29 enero, 2024 By Adalberto Villasana Miranda
Abanico, por Ivette Estrada.
Abanico, por Ivette Estrada.

Somos o fuimos víctimas del acaparamiento, de ese deseo inexplicable por coleccionar y aferrarnos a ciertos objetos sin importar su utilidad y valor.

Abanico

Trasfondos del acaparamiento

Por Ivette Estrada

En algún momento, todos somos o fuimos víctimas del acaparamiento, de ese deseo inexplicable por coleccionar y aferrarnos a ciertos objetos sin importar su utilidad y valor.

No sólo son reliquias almacenadas como parte de nuestra historia y recuerdos. A veces son objetos tuvieron un impacto efímero en nuestra vida o regalos fortuitos que preservamos sin discernir entre su utilidad o valor. Son las “cosas especiales” que guardamos para ocasiones extraordinarias, hasta que se deterioran o caducan.

¿Qué subyace en nuestro inescrupuloso afán de preservar cosas, a veces inservibles? Es un fenómeno muy extendido al grado de conformar lo que llamamos “el trastorno del acaparamiento” que posee entre el dos y el seis por ciento de los adultos de economías tanto desarrolladas como emergentes.

Si. No se trata de un afán de sobrevivencia, como la acumulación de objetos de primera necesidad, como ocurrió en la pandemia mundial del Covid-19. Tampoco tiene que ver con el nivel socieconómico del acaparador, sino de su incapacidad de categorización que parece incrementarse después de los 55 años.

La imagen popular del “viejo tacaño” es una noción antiquísima del fenómeno de guardar por guardar.

¿Eres un acaparador?

Todos solemos guardar infinidad de cosas, pero existen distintos grados de acumulación:  tolerante al desorden, coleccionista y acaparador.

Los coleccionistas eligen selectivamente lo que desean. Cada adquisición tiene intención y aprecio.

Las personas tolerantes al desorden pueden usar el método de “apilar” para almacenar artículos que aún no “procesan”.

Los acaparadores, en cambio,  están emocionalmente atados a su desorden y sufren de una incapacidad para distinguir lo que es “basura” o  un “tesoro”.

A esta clasificación clásica agregaría la de los previsores: guardar por si se llega a ofrecer alguna vez.

¿En qué momento nos volvimos acaparadores? De repente pasamos por esta espiral de especialismo, donde algo que comenzó bastante ordinario se convierte en un poco más extraordinario, y al final lo guardamos para ocasiones especiales…que pueden no llegar nunca.

Existen ciertas cosas hacia las que comenzamos con un apego emocional.  Sin embargo, al no usarlo, pero no solo ignorarlo, sino casi conscientemente no usarlo, lo convierte en suntuarios. Muchas veces, terminamos con cosas en nuestra casa que no tenían significado al principio, pero el no consumo las vuelve objetos de culto.

Acaparamiento en la era digital

Actualmente hay dos tipos de acaparamiento: el físico y el digital.

Y cuantas más cosas tenemos, ya sean cosas físicas o digitales, más tiempo tardamos en poder eliminarlas y más desalentadora se vuelve la tarea.

El objeto físico o virtual es una metáfora del tiempo. Confinamos pasado, lo que fuimos, los momentos y personas, las emociones. Pero también lo que anhelamos: la postergación de la felicidad, aquellos en lo que nos convertiremos, los momentos que deseamos. En cualquier caso, la acumulación da cuenta de trastornos de depresión/pasado y de ansiedad/futuro.

Contrarrestar la acumulación puede generarse a través del mindfulness o vivir en el momento presente, a través de la meditación, con lo que se desarraigará la incapacidad de clasificación.

Debemos pensar en la gestión de nuestras posesiones físicas o digitales. Es importante estar emocionalmente apegado a las cosas en nuestras vidas, pero a veces eso puede ser abrumador. Los objetos ordinarios pueden convertirse en tesoros percibidos, incluso cuando no lo son. Y podemos imbuirlos de tanto significado que llenamos nuestros espacios con cosas que nunca usamos.

Categorias: Opinión 

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Tambien te podria interesar...

Image

Cortina de humo con aranceles

12 diciembre, 2025

Yo Campesino Está en chino Cascada de impuestos a productos asiáticos, otra cortina de humo Miguel A. Rocha Valencia Desde hace siglos existe la invasión de productos chinos a México, pero en recientes décadas se volvió notable y las denuncias de que con ellos se afectaba a diversas industrias nacionales, resultaron cotidianas; lo curioso es […]

Image

Yo campesino

12 enero, 2023

La impresión del presidente de Estados Unidos, Joseph Biden y del primer ministro de Canadá Justin Trudeau respecto al ganso mexicano seguramente se volvió más negativa, no sólo por los discursos paralelos expresados por cada quien, sino por aquello de que el dueño de la palabra y el micrófono “soy yo”

Image

Van en medio de desmentidos y acusaciones

2 octubre, 2025

Yo Campesino Sin discurso García Luna, privilegios, corrupción, neoliberales, “los de antes”, culpables Miguel A. Rocha Valencia Salvo para propaganda gastada y demagógica, no se le ve ninguna otra utilidad a las mañaneras que exhiben a un(a) personaje intolerante que recurre a lugares comunes para eludir cualquier responsabilidad o culpa del cártel de la 4T […]

Image

Prefieren gastar en barriles sin fondo

17 julio, 2025

Yo Campesino Resumideros Habría algo de dinero para invertir, pero prefieren gastar en barriles sin fondo Miguel A. Rocha Valencia Es curioso que cuando se refieren en la 4T al tren Maya, la refinería de Dos Bocas o al Aeropuerto militar de Santa Lucía digan que se trata de obras decididas por “el pueblo” y […]

Cargando...