Discurso palaciego con logros que nadie ve

12 junio, 2025 By Adalberto Villasana Miranda
Miguel Ángel Rocha. Yo campesino.
Miguel Ángel Rocha. Yo campesino.

Yo Campesino

Grotesco

Cada vez resulta menos creíble el discurso palaciego con logros que nadie ve

Miguel A. Rocha Valencia

Cada vez que recibe críticas la encargada de la presidencia, contesta que las hacen quienes tienen envidia o no quieren reconocer los “grandes logros” a la 4T que, para efectos concretos, se refieren al supuesto rescate de la pobreza extrema de cinco millones de mexicanos y una lucha frontal contra el crimen que por un lado permite confiscar drogas, precursores, laboratorios y dinero y por el otro capturar a “generadores de violencia” antes llamados delincuentes.

Pero al mismo tiempo y aunque las cifras que presentan en las mañaneras no son comprobables incluyendo el número de asesinatos diarios que según el oficialismo han disminuido desde que se acabaron los abrazos, no nos recuerdan que la cantidad de desaparecidos y secuestrados se incrementó en más del 100 por ciento y que las principales víctimas son mujeres y menores de edad.

Tampoco nos dicen que cerca del 36.9 por ciento de la población activa y con empleo, cayó en la pobreza laboral al no alcanzarle el salario para adquirir la canasta básica y atender su salud, menos aún ejercer el derecho a la recreación.

Para colmo y aunque la percepción es de inseguridad en siete de cada diez mexicanos, no hay ya un Coneval que nos pueda dar referencias ciertas a cerca de las condiciones en que se encuentra la población y para la 4T o mejor dicho la president(a) debemos aceptar a pie juntillas lo que el oficialismo nos dicte.

Tal vez por eso se enojó mucho la mandataria cuando en la mañanera una reportera le dijo que eso de que el pueblo eligió a los nuevos miembros del poder Judicial, era una mentira pues todos aspirantes y ganadores, desde las tómbolas del Legislativo hasta los acordeones electorales, son afines al oficialismo. Eso ni aunque lo nieguen con la mayor de las vehemencias, se puede desmentir.

Mayor fue el enojo cuando también se tildó de mentira aquello de que el pueblo eligió, ya que, de los 100 millones de electores, sólo nueve millones votaron por los candidatos de Morena y aliados, por lo cual, si le aplicamos a la 4T sus métodos, podríamos decir que el 90 por ciento de los mexicanos repudiaron el proceso.

Y el repudio fue porque la “elección” sería sobre perfiles definidos por el oficialismo, incluyendo a quienes serán nuevos miembros de la SCJN, especialmente su presidente afín al 100 por ciento al obradorismo.

Tampoco nos dicen que, de las políticas de gasto, se sustrae la principal tajada para mantener necedades del profeta como Pemex y su deuda por 100 mil millones de dólares, su no pago a proveedores por 500 mil millones de pesos y sus pérdidas anuales por arriba de los 60 mil millones de dólares.

Ni hablar de los subsidios al Tren Maya “propiedad” de los militares que este año recibe 13 mil millones de pesos acumulables a su pérdida de 60 mil millones especialmente en operación y mantenimiento.

Lo mismo con la defendida línea aérea del pueblo que nomás no despega y a la cual, se le transfieren recursos fiscales para su operación, al igual que al aeropuerto que ni con decretazos logra alcanzar el punto de equilibrio y mucho menos obtener ganancias.

Por eso quien ocupa palacio Nacional asume posicione burlescas, con muecas que dan risa y debían darnos pena por tratarse de quien se trata y en vez de asumir la estatura del cargo, se revela como la presidenta de unos cuantos millones de mexicanos, aunque asume que esos representan la voluntad de todo el pueblo.

Mientras tanto, la incertidumbre crece, las inversiones no llegan, los ingresos disminuyen ya por ventas o por remesas, el caso es que hay cada vez menos dinero e inversión. NO se trata de festinar los dineros que ya hay en el país sino promover que lleguen recursos nuevos, que no llegarán luego de las mentiras y mascaradas de este régimen de verborrea barata, también llamada demagogia. Para esto último son muy buenos, ojalá así fueran para gobernar, pero no se les da y lo peor es que no saben deslindar la administración de la cosa pública con el activismo sectario, ese del que han vivido décadas y les sirve para destruir, justo como lo hacen ahora con instituciones, la República y la democracia.

Categorias: Opinión 

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Tambien te podria interesar...

Image

Al final es una caricatura de lo esperado

5 agosto, 2024

Palabras Más Se terminó el tiempo La propaganda es a una democracia lo que la coerción a un estado totalitario. Noam Chomsky Arturo Suárez Ramírez / @arturosuarez No hay posibilidad de negar que el final del sexenio de López Obrador es una caricatura de lo esperado, incluso el tabasqueño debe estar sorprendido de sus pocos […]

Image

Reasume el poder un agresivo Trump

22 enero, 2025

Yo Campesino Mesianismo Bajo el concepto del destino manifiesto reasume el poder un agresivo Trump Miguel A. Rocha Valencia Proclama Donald Trump sus amenazas y coloca en el centro de su discurso la prosperidad de Estados Unidos como centro del universo con amago directo contra migrantes, grupos criminales y competidores comerciales, convertidos hoy en enemigos […]

Image

Buscar productos en línea cambia drásticamente

10 febrero, 2025

Abanico La transición del SEO al AEO Por Ivette Estrada La forma en que las personas buscan productos en línea cambia drásticamente. Los motores de respuesta como ChatGPT, Perplexity y Gemini ahora brindan respuestas instantáneas y completas a las consultas de los usuarios. ¡Ya no se necesita navegar por varios sitios web! Esto presenta grandes […]

Image

Existe un individualismo pertinaz

27 octubre, 2025

Abanico Falsa adversidad Por Ivette Estrada ¿Competitividad o colaboración? Esa es una disyuntiva profundamente anclada en la mentalidad profesional, incluso cuando se alienta el trabajo en equipo. Existe un individualismo pertinaz y una noción silente de que el éxito no se comparte, sólo aparece como una política correcta en los discursos de éxito. Pero tal […]

Cargando...